La tasa de desocupación subió en Argentina y afectó con mayor fuerza a la provincia de Buenos Aires, donde se concentra el 80% de los nuevos desempleados.
En medio de una creciente ola de despidos en distintos sectores, el gobierno bonaerense advirtió sobre el impacto del modelo económico de Javier Milei con un dato preocupante: 8 de cada 10 nuevos desocupados en el país son de la provincia de Buenos Aires.
Según el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), en el tercer trimestre de 2024 se registró un fuerte deterioro del empleo en las principales ciudades del país. En un universo de más de 20 millones de personas activas, la tasa de desocupación a nivel nacional aumentó más de un punto y alcanzó el 6,4%, lo que equivale a 1,3 millones de personas sin trabajo.
Un informe de CAME sobre exportaciones reveló un incremento tanto en dólares como en volumen, con un superávit comercial de US$ 6.745 millones.
El Índice de Confianza del Consumidor (ICC) bajó un 0,3% en febrero respecto a enero. El mismo dato de la economía creció 31% interanual.
Ante este escenario, el ministro de Economía bonaerense, Pablo López, puso el foco en la situación provincial. Según detalló, la provincia de Buenos Aires sufrió con mayor crudeza el impacto de las políticas económicas nacionales, con una tasa de desocupación que escaló hasta el 8,3%.
“El modelo del Gobierno nacional castiga a la industria, al comercio y a la construcción, y la provincia de Buenos Aires es la que más lo sufre. De cada 10 nuevos desocupados/as argentinos, 8 son bonaerenses (165.000 personas)”, escribió el ministro de Economía bonaerense Pablo López en X.
En cifras concretas, de los 207.000 nuevos desempleados registrados en Argentina, 165.000 corresponden a la provincia de Buenos Aires. En tanto, Tierra del Fuego y Chaco fueron las siguientes provincias con mayores tasas de desempleo, con 8,1% y 7,1%, respectivamente.
Por otro lado, las provincias con menor desocupación fueron Santiago del Estero (2%), Chubut (2,9%) y Río Negro, Misiones y La Rioja, todas con un 3,2%. Según López, el impacto del ajuste en Buenos Aires se debe a su perfil productivo, donde la industria, la construcción y el comercio fueron los sectores más golpeados. “El país no es viable sin mercado interno, sin agregación de valor, sin producción”, concluyó.