El turismo en Argentina tuvo un fuerte impulso durante el feriado de carnaval, con millones de personas viajando a distintos puntos del país. Según un informe de la Cámara Argentina de la Pequeña y Mediana Empresa (CAME) la actividad económica generada superó las expectativas y dejó cifras récord en ocupación hotelera, gastronomía y transporte.
El impacto económico del fin de semana alcanzó los $701.064 millones, con un gasto promedio diario de $89.167. Además, la estadía promedio fue de 2,8 días, reflejando la preferencia por escapadas cortas en diversas regiones del país. A pesar de algunas reprogramaciones debido al clima, la mayoría de los eventos se desarrollaron con normalidad.
Las provincias con mayor tradición carnavalera, como Corrientes, Entre Ríos y Jujuy, registraron una gran concurrencia en sus festividades. En Gualeguaychú, las comparsas desfilaron ante un público multitudinario, mientras que en la Quebrada de Humahuaca la ocupación hotelera fue altísima. Cabe aclarar que estos dos puntos del país tienen la delantera si de carnavales se habla.
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A pesar del mal clima, en el fin de semana de carnaval, se movilizaron a 2,8 millones de personas en todo el país.
Los carnavales en la provincia de Buenos Aires
Durante el fin de semana extralargo, la Costa Atlántica registró una importante afluencia de visitantes. Entre las últimas horas del viernes y el mediodía del sábado, más de 1.000 vehículos por hora ingresaron a los principales balnearios, impulsando el turismo en la región. Mar del Plata alcanzó una ocupación hotelera del 75%, consolidándose como uno de los destinos más elegidos. La ciudad ofreció una variada agenda cultural y gastronómica, reafirmando su atractivo para turistas de todo el país.
En el Partido de La Costa, por su parte, la Comparsa Tuyú Tuyú se presentó en San Clemente, con espectáculos de baile, murgas y diversas expresiones artísticas. Además, hubo actividades culturales y deportivas en la playa, ofreciendo opciones de entretenimiento para todos los visitantes.
A pesar de algunas lluvias y tormentas aisladas, las festividades en la Costa Atlántica se llevaron a cabo con éxito. La rápida adaptación de las localidades permitió mantener un flujo constante de turistas, reforzando el impacto positivo del Carnaval en la economía local.