Una cuadrilla de empleados de seguridad recorrió La Loma ofreciendo alarmas y cámaras ante la creciente ola de robos que afecta al barrio.
Frente a la creciente ola de robos en La Loma y el cartel viralizado que advierte sobre la inseguridad en el barrio, empleados de una conocida empresa de seguridad comenzaron a ofrecer sus servicios puerta a puerta. La oferta de alarmas y cámaras de vigilancia se presenta como una alternativa ante la falta de patrullajes policiales.
La reciente ola de robos tiene a los frentistas de La Loma cada vez más preocupados, al punto de sentir que no pueden contar con la protección necesaria. La situación se intensificó después de que los vecinos colocaran un cartel que avisa "zona liberada, vecinos armados", reflejando su desesperación por la creciente inseguridad.
Los vecinos de La Loma pusieron un cartel en el que advierten que están armados. Contaron a 0221.com.ar cómo viven en una "zona liberada".
Dos ladrones y un tercero que arribó tras un mensaje, amenazaron y se llevaron varios elementos de valor de una casa de Gonnet. No hay detenidos.
En respuesta a esta situación, trabajadores de Prosegur, una empresa especializada en seguridad privada, comenzaron a recorrer las calles del barrio el último martes ofreciendo sus sistemas de alarmas monitoreadas y cámaras de vigilancia.
Desde hace varios meses, la zona enfrenta un aumento notable de delitos, especialmente robos a viviendas en horarios nocturnos y en momentos de ausencia de los propietarios. Según relataron los habitantes, los delincuentes aprovechan la tranquilidad del barrio para ingresar a las casas sin que los propietarios puedan reaccionar a tiempo.
Los residentes comentan que, aunque la comisaría Cuarta se encuentra relativamente cerca, las patrullas no pasan con la frecuencia esperada. Los robos no solo afectan a las viviendas, sino que también se han registrado intentos de asalto en la calle, a plena luz del día.
Ante la creciente preocupación, además de las alarmas y cámaras de seguridad, algunos vecinos comenzaron a tomar medidas adicionales para protegerse, como reforzar puertas y ventanas e incluso empezar clases de defensa personal.
El temor persiste y los vecinos de La Loma continúan buscando soluciones para enfrentar esta crisis, mientras continúan los reclamos por mayor presencia policial y medidas preventivas que garanticen la tranquilidad en el barrio.