Una hizo silencio. Habló el dueño del colegio. Todas las frases con que se cerró el juicio oral. Cómo sigue el proceso. ¿Habrá detenciones? Sentidos textuales.
De los ocho acusados en el juicio oral por la muerte de Lucas Lin, siete hicieron uso del derecho a tener la última palabra antes que los jueces se retiren a deliberar el veredicto. Fue luego de nueve audiencias desarrolladas en el fuero Penal de La Plata. ¿Qué dijeron y cómo sigue el debate?
En un juicio oral, la última palabra que se otorga a los acusados antes de que los jueces se retiren a deliberar es un derecho procesal fundamental. Este momento tiene implicaciones legales, simbólicas y prácticas tanto para los acusados como para el desarrollo del juicio en su etapa final.
Varios testigos aportaron información vital para el esclarecimiento de la muerte de Lucas Lin en La Plata. Cómo sigue el juicio oral. El enojo del Tribunal.
En las cuatro audiencias del juicio oral, testigos aportaron información que puede resultar clave para esclarecer la muerte de Lucas Lin en el Colegio Lincoln.
La última palabra es la oportunidad que tienen los acusados de dirigirse directamente al tribunal para expresar lo que consideran relevante antes de que los jueces emitan un veredicto. Este derecho está contemplado en la mayoría de los sistemas judiciales como una garantía procesal que refuerza el principio de defensa.
Es un espacio en el que los acusados pueden expresar sus pensamientos, emociones o cualquier cuestión que no haya sido abordada durante el juicio.
Carolina Muro, "la profe" a cargo del grupo de colonos del que formaba parte Lucas. Está acusada de abandono de persona seguido de muerte, con un pedido de seis años y seis meses de prisión, más su inmediata detención. Se llamó a silencio. A simple vista se le notaba el dolor y tristeza en su rostro.
Rubén Monreal, propietario del Colegio Lincoln de La Plata, acusado de "homicidio culposo" con un pedido de condena de cinco años de cárcel más su pronta detención. "Es poco lo que puedo agregar, estoy invadido por una profunda tristeza, todos hemos perdido a Lucas".
Roxana Costa, accionista del colegio, auto percibida como "asesora organizacional", acusada por "homicidio culposo" con un pedido de cuatro años y seis meses de prisión, también con pedido de restricción de su libertad. "Lamento de corazón el hecho ocurrido, estoy a disposición de la Justicia, no soy responsable", señaló.
Martín Argüelles, guardavidas de la colonia, acusado de "homicidio culposo" y un reproche de tres años de prisión en suspenso. Agradeció a su defensor, a los jueces por el trato y "decirle a la familia Lin que estoy a su disposición".
Osvaldo Ramos, director de la colonia, acusado de "homicidio culposo" y un pedido de condena de tres años de prisión en suspenso. En su mensaje se dirigió a la familia Lin: "Espero que después de este juicio encuentren verdad, justicia y paz".
Marcos Echaniz, coordinador de la colonia, señalado por "homicidio culposo" con un requerimiento de un año y seis meses de prisión. Les expresó sus condolencias a los padres de Lucas.
Por último, los inspectores municipales Miriam Salinas y Diego de Luca, procesados por "incumplimiento de los deberes de funcionario público y falsedad ideológica de instrumento público", con una solicitud de tres años de prisión en suspenso.
La mujer le expresó sus condolencias a la familia Lin, lo mismo que su compañero quien, además, agregó: "Es muy triste para todos, me hubiera gustado que llamen a declarar a los dueños de otras colonias de vacaciones para que ellos expliquen la rigurosidad con la que trabajamos".
La próxima audiencia será el lunes 2 de diciembre, fecha en que se conocerá el adelanto de veredicto. Una semana después estarán los fundamentos.
El juicio está a cargo del Tribunal Oral Criminal III de La Plata, presidido por Santiago Paolini y acompañado por los jueces Andrés Vitali y Ernesto Domenech por la secretaría de Andrea Lamamy y Flavia Mazza.
Lucas tenía 5 años cuando en la tarde del martes 5 de febrero de 2019 se ahogó en la pileta de la colonia de vacaciones del colegio. El predio recreativo se encuentra en 518 entre 135 y 137. Fue habilitado por la Municipalidad y se sospecha que no contaba con todas las medidas de seguridad necesarias ni el personal adecuado.