Un nuevo mercado de pases quedó cerrado hasta la segunda mitad del año en Gimnasia, pero hay mucho para revisar atrás en el tiempo.
Apuestas que no salieron, incorporaciones, cantidad y no calidad, refuerzos que no rindieron lo esperado son parte de este repaso que no tiene que ver con el presente mercado de pases de Gimnasia.
En el presente, concretó las llegadas de Gastón Suso, Luis Ingolotti, Juan Manuel Villalba, Matías Melluso, Pedro Silva Torrejón, Bautista Merlini, Junior Moreno, Alejandro Piedrahita y Jan Hurtado. El tiempo será testigo del rendimiento de cada uno pero es un buen momento para meterse en nombres insólitos que llegaron y muchos no jugaron desde el 2000 a la fecha.
El ilustrador boliviano, Diego del Barrio realizó un trabajo que define a los clubes más elitistas del mundo. ¿Qué lugar ocupan Estudiantes y Gimnasia?
El fútbol argentino entrega historias particulares fecha a fecha, y en este caso, una tuvo lugar en el Estadio del Bosque con una hincha de Gimnasia.
Algunos casos particulares que en el Lobo no pudieron mostrarse y después construyeron una buena carrera. Por ejemplo el marplatense Joel Carli que no jugó ni un minuto y tiempo después fue un jugador clave y capitán del Botafogo, Kevin Gutiérrez, que en Gimnasia solo sumó minutos en la final de Copa Argentina ante Rosario Central, y tras su salida se destacó en Godoy Cruz y hoy es un hombre determinante en Defensa y Justicia.
Un caso raro fue el del delantero uruguayo Héctor “Romario” Acuña. Llegó precedido en 2013 de buenos antecedentes con 11 goles en 15 partidos en el Tanque Sisley y acá nunca mostró nada. Apenas jugó 4 partidos, no hizo goles y sufrió una expulsión. Esto ocurrió en la gestión de Daniel Onofri.
Algunos nombres que generaron expectativas en su llegada y no pasó nada fueron los de Gastón Casas (2 goles en 10 partidos), el “Lorito” Jiménez (jugó solo 9 encuentros), Fernando Crosa que en la época de José Muñoz se sumó para jugar la Copa Libertadores y apenas estuvo en dos partidos y no jugó nunca en certámenes locales.
Volvieron muchos referentes pero también hay una lista de nombres muy particulares como el de Joel Carli (no jugó), Facundo Imboden (7 partidos), los mexicanos Marco Figueroa y Omar Tejeda (no jugaron), Luis Quinteros (8), Sebastián Ereros (5), Lucas Márcico (hijo del Beto), Jeremías Ruíz (libre de Estudiantes), René Lima (3), Martín “Martillo” Ortíz, Gaspar Paéz, Nery Espinoza, Fabián Artime (4), Eros Pérez (7), el “Tigrillo” Salazar (8) hizo un gol, entre otros.
Llegó la sucesión del ingeniero Francisco Gliemmo por unos pocos meses y ahí se encuentran nombres como los colombianos Carlos Córdoba (14), Francisco Foronda (no jugó nunca), Martín Mandra (7), Emiliano Impallari (2), Pietravallo (8).
En un período muy emblemático y polémico como la llegada de Juan José Muñoz a la presidencia se pueden citar algunos futbolistas que pasaron sin pena ni gloria como Fernando Crosa, Kilian Virviescas (5 partidos), Savoia (un gol en 11 encuentros), Akerman (4 partidos), Juan Casado, Juan Carlos Ferreyra (2 goles en 17 juegos), Nicolás Medina (7 presencias).
En la última gestión de Héctor Delmar hay nombres “curiosos”. Ricardo Moreira, que fue cedido por Independiente en el 2011 y apenas se mostró en 6 juegos; el chileno Boris Rieloff (10 partidos); Fernando Pellegrino un arquero que siempre fue suplente; Rodrigo Marangoni (menos de 10 participaciones).
Lo sucedió Daniel Onofri y la puntería no fue acertada: el citado Acuña, Pablo Russo (no jugó), Roberto Bochi (sólo 3 minutos en cancha), Iván Borghello (18 partidos), Leandro Corullo (no jugó), Juan Pablo Rodríguez Conde (13), David Distéfano (1), Nery Cardozo (10), Sergio Velázquez (no jugó) y Florentín Noguera (3).
Uno de los nombres más exóticos es el de la torre colombiana, Janeiler Rivas, un central de 1,94, que Diego Maradona hizo jugar 76 minutos frente a Defensa y Justicia. Debut y despedida. Hoy juega en Independiente Petroleros de Bolivia, luego de pasar por equipos peruanos de menos valía.
Un nombre que no estaba mal pensado pero no se le dio continuidad es el de Kevin Gutiérrez. Un solo partido estuvo en cancha en el Lobo. Se apostó por dos chicos que en las inferiores de Estudiantes o pegaron el salto como Hernán Tifner y Lucas Calderón y no resultó.
Otros apellidos que pasaron rápidamente al olvido conforman una larga lista: Jerónimo Barrales (8 partidos), Alejandro Melo (2), Santiago Rosales (6), Mauro Guevgeozian (11, hizo un gol), Brian Mansilla (10), Claudio Spinelli (9), Pablo Velázquez (10), Marco Torsiglieri (8), Jonathan Agudelo (5, un gol), Lucas Barrios (8, 2 goles), Rodrigo Holgado (13).
En el primer mercado de la gestión no pudo intervenir en el mercado de pases porque el club estaba inhibido. La peor llegada fue la de Brian Blasi, que se fue sin haber jugado un minuto. Hay nombres que no rindieron y tuvieron poca participación como Luciano Gómez, Valentín Rodríguez, Juan Cruz Esquivel, Matías Ramírez, Franco Troyanski, David Zalazar, Gustavo Canto, Christian Colman, Federico Milo, Yonatán Rodríguez.
Algunos no jugaron, otros lo hicieron poco y no cumplieron con las expectativas mínimas, muchos no tienen una justificación sobre su llegada. ¿La lista de “chascos” se cerrará acá o siempre hay lugar para sumar nombres? Historias de mercados que no se recordarán por alegrías, tal vez a la distancia puede despertar alguna sonrisa. Se podría armar hasta más de un equipo con futbolistas que no alcanzaron a debutar, jugaron minutos o menos de cinco partidos completos). “Refuerzos”, que no lo fueron.