Este sábado 21 de diciembre a las 21 en el Estadio Madre de Ciudades de Santiago del Estero, Estudiantes jugará la final del Trofeo de Campeones por haberse consagrado en la Copa de la Liga ante Vélez, reciente campeón de la Liga Profesional, y vuelve a jugar partidos importantes en el último mes del año, cuando el calendario se consume.
La más reciente es el primer título que consiguió en el ciclo de Eduardo Domínguez como entrenador y que le dio la posibilidad de jugar por esta nueva estrella. Fue en el estadio de Lanús el 13 de diciembre cuando con gol de Guido Carrillo venció 1 a 0 a Defensa y Justicia y ganó la Copa Argentina, que le valió además jugar la Copa Libertadores de este 2024, y que sirvió como despedida de dos emblemas del club como Mauro Boselli y Mariano Andújar.
Ahora ocurrirá algo similar con Pablo Piatti y Federico Fernández, que fueron protagonistas del choque ante el Halcón. Torneos en Argentina, Copa Sudamericana y Mundial de Clubes fueron citas de honor para el team albirrojo, que supo tener grandes alegrías y algunas desilusiones, como aquella caída ante el Inter de Porto Alegre y el Barcelona de Pep Guardiola.
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El Estudiantes del Cholo Simeone
El Torneo Apertura 2006 tuvo una persecución incansable el Estudiantes del Cholo con el Boca de Ricardo La Volpe. En la última fecha del torneo el Pincha debía ganar y el Xeneize perder en La Bombonera para forzar un desempate. Los partidos se disputaron el 10 de diciembre.
Boca se puso en ventaja con gol de Martín Palermo a los 30 de la parte inicial, Claudio Graf igualó para Lanús sobre el final del primer tiempo. El Pincha atacaba con todo, pero no podía vulnerar a un Arsenal recluido contra su arco. Llegaron buenas noticias desde la Bombonera: Rodrigo Archubi puso el 2 a 1 para el Granate.
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Estudiantes estaba a un gol de forzar la final, pero ese grito no llegaba. El reloj marcaba 41 minutos. Córner para los de Diego Simeone en el Estadio Único de La Plata, centro pasado y Agustín Alayes metió un cabezazo bombeado que se clavó a espaldas de Catriel Orcellet. El desahogo, la locura y la esperanza hasta que Mariano Pavone puso el 2 a 0 final. Había que jugar un desempate y la famosa frase de Simeone “el que no crea que no venga”.
La gran final. Estadio José Amalfitani un 13 de diciembre. Las tribunas explotaron. Todo empezó mal. A los 4 minutos Palermo anotó el 1 a 0, justo Martín, pero los del Cholo no se rindieron. A los 15 de la segunda etapa tiro libre. Un joven y atrevido José Sosa corrió de la zona a Leandro Benítez y a Juan Sebastián Verón. La fe y la jerarquía hizo volar la pelota por encima de la barrera y se clavó en el ángulo de Bobadilla para el 1 a 1. A los 35 una corajeada del Tanque Pavone para el segundo y después aguantar el pitazo final. Estudiantes campeón en diciembre.
Las desilusiones
Final de la Copa Sudamericana. Inter de Porto Alegre le cortó el invicto en 25 y 32 en la ida y en la revancha el 3 de diciembre el Flaco Alayes puso el 1 a 0 en segundo tiempo y forzó el suplementario. Verón tuvo que dejar la cancha con un dedo destrozado en el primer tiempo agregado y cuando todo parecía que terminaba en una definición desde el punto penal a los 8 del segundo suplementario Nilmar en una jugada sucia anotó el empate y dejó sin nada al equipo de Leonardo Astrada, aunque para muchos sirvió de experiencia para la Copa Libertadores siguiente.
Diciembre del 2009 era el momento del Mundial de Clubes en Dubai. Todos esperaban un choque con un Barcelona catalogado como el mejor equipo de todos los tiempos, pero primero había que superar otro escollo que a Alejandro Sabella desvelaba. La cita fue el 15 de diciembre con el Pohang Steelers. Con dos goles de Leandro Benítez ganó 2 a 0 y se abrió el camino para el partido de la vida: Estudiantes-Barcelona.
El 19 de diciembre el Pincha jugó una final memorable pero se quedó sin nada. Mauro Boselli enmudeció al mundo con un cabezazo inapelable para colocar el 1 a 0. Los catalanes no podían con un equipo que dejó el alma en la cancha. Pep rompió esquemas y mandó defensores a cabecear al área. El tiempo se consumía y a los 44 Pedrito aprovechó una jugada fortuita para forzar el alargue.
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Estudiantes aguantaba como podía la tenencia azulgrana y a los 5 del segundo tiempo suplementario llegó el famoso gol de pechito de Lionel Messi. Un cabezazo del Leandro Desábato pudo llevar el juego a los penales, pero no pudo ser. Con el tiempo el propio Lio reconoció “ese partido a Estudiantes se lo ganamos de pedo” y Guardiola llenó de elogios el planteo de Sabella y dijo que fue el triunfo más difícil.
Otras alegrías en diciembre
El 12 de diciembre del 2010 llegó el segundo título con Sabella y la estrella número 11. Estudiantes de local en la cancha de Quilmes. Una vez más Arsenal en el camino y Vélez como principal rival. Casaca gris, partido complicado, no se podía quebrar el cero. Alejandro tomó una decisión no sencilla. A los 13 del complemento mandó a la cancha a Rodrigo López y sacó nada menos que a Verón.
El “Roro” le pagó con goles. Cristian Campestrini era la figura del equipo de Gustavo Alfaro pero a los 29 López logró el gol para el 1 a 0 y a dos del final puso el 2-0 definitivo, y Estudiantes campeón del Torneo Apertura 2010. De ese equipo quedan dos sobrevivientes: Fede Fernández y Enzo Pérez, y ahora la Bruja como presidente. Para el recuerdo la frase de Verón: “si Ramón (Díaz) dice que San Lorenzo es un Falcón, nosotros somos un rastrojero, vamos a tardar pero vamos a llegar”. Ahí después un hincha armó “la rastrujita”, que aún hoy circula orgullosa por las calles de la ciudad.
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Cinco años más tarde llegó otro triunfo importante. El 5 de diciembre del 2015 el Pincha goleó 4 a 0 a Olimpo y se clasificó para jugar la Copa Sudamericana. Los golea Gastón Fernández, Juan Sánchez Miño, Álvaro Pereira y Ezequiel Cerutti. Tras la victoria Gabriel Milito comunicó su renuncia como DT y lo reemplazó Nelson Vivas.
Otra vez diciembre, otra vez una final. Para muchos puede ser un título menor pero siempre es bueno jugar finales e intentar ganarlas. Estudiantes escribirá este sábado un nuevo capítulo de su rica historia.