Investigadores del Conicet La Plata desarrollaron un manual para la gestión segura de los elementos, buscando reducir riesgos ambientales.
Un equipo de investigadores del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de La Plata (Conicet La Plata), junto con una cooperativa de reciclaje, presentó un protocolo para la gestión segura de baterías de litio agotadas. El documento está dirigido a la comunidad y detalla procedimientos para su manejo, almacenamiento y reciclado, con el objetivo de prevenir riesgos ambientales.
El protocolo establece pautas para identificar, clasificar y manipular baterías usadas provenientes de dispositivos electrónicos y vehículos eléctricos. También incluye recomendaciones sobre almacenamiento en condiciones seguras para facilitar su reciclado y reutilización.
Los rugbiers condenados por el crimen de Fernando Báez Sosa participan en talleres y actividades mientras cumplen sus penas en Melchor Romero.
El Servicio Meteorológico Nacional sigue manteniendo el alerta amarillo para La Plata y gran parte de toda la provincia de Buenos Aires.
Este trabajo es parte de un proyecto integral de economía circular que busca optimizar la gestión de residuos electrónicos. El equipo apunta a mitigar el impacto ambiental y generar oportunidades económicas a través del reciclaje controlado.
El protocolo fue desarrollado por el Centro de Investigación y Desarrollo en Ciencias Aplicadas (CINDECA) del Conicet junto con el Laboratorio de la Unidad de Investigación de la Planta Piloto Multipropósito y del Laboratorio de Servicios a la Industria y al Sistema Científico (UPL-PlaPiMu-LaSeISiC) y la Cooperativa de Trabajo “Reciclando Trabajo y Dignidad”. Surgió como parte de un proyecto presentado en una convocatoria nacional del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación en 2023.
La cooperativa, con más de 15 años de experiencia en gestión de residuos electrónicos, fue la impulsora inicial del proyecto. Con alrededor de 50 trabajadores, ha trabajado en el retiro y reciclaje de residuos electrónicos, ahora también incluyendo baterías de litio.
“Armamos una propuesta integral para el reciclado de baterías de litio que incluyó elaborar un manual informativo para la comunidad y capacitar al personal de la cooperativa en la gestión y acopio de estos elementos, sobre todo en materia de seguridad porque están compuestos por elementos tóxicos e inflamables. En ese sentido, su reciclado implica condiciones más controladas de laboratorio”, contó Andrés Peluso, investigador del Conicet y uno de los responsables del trabajo.
El protocolo incluye medidas como el uso de guantes y gafas de seguridad, evitar daños en las baterías y almacenarlas en contenedores ignífugos a temperaturas controladas. Además, detalla procedimientos para prevenir riesgos asociados a materiales inflamables y tóxicos.
A futuro, el equipo planea desarrollar métodos para extraer y reutilizar los componentes de las baterías en nuevos procesos industriales.